Si aún no has encontrado tu pareja ideal, durante tres noches, al acostarte, visualiza una luz rosada que envuelve tu cuerpo hasta que te quedes dormido.
Luego, por la mañana, toma una ducha y echa sobre tu cuerpo, desde los hombros hacia abajo, sin salpicar la cabeza ni el rostro, una infusión realizada con agua, cáscara de manzana y una cucharada de miel.
La cuarta noche, al acostarste, enciende en el cuarto un sahumerio, y visuaíizate envuelto totalmente en un halo de calor y de luz blanca. Luego repite fervorosamente: "Sé que quiero amar, y que hay alguien que está dispuesto a entregarse a mi corazon. Deseo que llege lo más pronto posible."
Luego imagina que esta persona ingresa en tu cuarto, te habla, te acaricia y también se encuentra en un halo de intensa luz. Visualiza que se despide con ternura y, mientras se va alejando, finaliza este ritual diciendo: "El amor llegará porque así lo deseo."