Ante todo el poder de un eclipse, sin duda hay que tomar precauciones al realizar un ritual. Entre ellas, es esencial que sepas con qué energía estás tratando y que tengas los fundamentos necesarios para realizar el ritual correcto. Si no sabes mucho del tema o no estás preparado para hacer un ritual, no lo hagas. Porque estamos hablando de grandes fuerzas en movimiento. Es lo mismo que cuando tenemos portales, así que se tratan de energías muy poderosas. Además, si alguien no sabe lo que está haciendo o si simplemente su energía no es la adecuada ese día, esto interferirá sin duda en el desarrollo y el resultado del ritual.
Así que si estás bien, has estudiado, tienes confianza, o incluso si te acompaña alguien que tenga más conocimientos sobre esa energía, adelante. Y eso vale para cualquier ritual que vayas a hacer en la vida. Si no te sientes bien o seguro, una oración es más que suficiente. Con una simple oración puedes mover mucha energía a través de la verbalización y, aunque tengas un día de bajón, no afectará en absoluto a la vida de la persona. La oración es muy poderosa y no te dará ninguna respuesta negativa si no funciona por algún motivo.
Si has decidido hacer un ritual, estudia muy bien los elementos para ver si resuenan con la energía del eclipse. ¿Es solar? ¿Anular? ¿Lunar? ¿En qué signo está? ¿Y los elementos que elijas están en línea con esta energía? Los cristales, el color de las velas, las hierbas, el incienso... Comprende el razonamiento que hay detrás de este ritual, y luego hazlo con tranquilidad.