“Mi San Expedito de causas justas y urgentes,
Ayúdame en esta Hora de Aflicción y Desesperación, intercede por mí ante Nuestro Señor Jesucristo.
Tú que eres un guerrero santo.
Tú que eres el Santo de los Afligidos.
Eres el Santo de los Desesperados,
Tú que eres el Santo de las Causas Urgentes,
Protégeme, ayúdame, ayúdame fuerza, coraje y serenidad.
a conseguir un buen trabajo
Ayúdame a superar estas horas difíciles, protégeme de todos los que puedan hacerme daño,
protege a mi familia, responde a mi pedido con urgencia.
Devuélveme la paz y la tranquilidad.
Estaré agradecido por el resto de mi vida y llevaré tu nombre a todos los que tengan fe.
Santo Expedito, ruega por nosotros. Amén.”